Te invito a entrar en mi vida

           

              

Muchas veces cuando empezamos a sentir algo especial por una persona, decidimos huir.Aunque parezca de cobardes, es únicamente un mecanismo de defensa para protegernos de todo aquello que pensamos que nos puede hacer daño. y no nos damos cuenta de todo lo bueno que se puede llegar a experimentar cuando se está enamorado, es por ello por lo que nunca le damos una oportunidad al amor. Y siendo sincera todo lo que necesito ahora es amor, pero me asusta sentirlo de nuevo.


                                                   

Te inventaré cada mañana

Aunque pase el tiempo, aunque pasen las ganas, aunque pasen otros. Aunque tu cielo ya no sea mi cielo. Aunque tus locuras ya no sean como las mías. Aunque me refugie en otros brazos, aunque te pierdas en otros ojos. Aunque mi vida se aleje de la tuya, y no volvamos a encontrarnos y ya nos quede muy lejos el camino de regreso. Aunque tus manos recorran otro cuerpo, y ya no te acuerdes de mí. Fuiste esperanza cuando no lo había, fuiste sueños entre realidades que hacían daño. Fuiste amor cuando ya no sabía amar. Fuiste tú que sin razones dejaste una razón en mí.

                                 

Los pies sobre la tierra

aunque pise barro y mierda.

Alguien dijo alguna vez que en el momento en que te paras a pensar si quieres a alguien ya has dejado de hacerlo para siempre- dije.

-¿Quien dijo eso? ¿Amigo tuyo?

-Algo así.

-Vas a tener que presentármelo.

-No te ofendas, pero a veces una se siente más libre de hablarle a un extraño que a la gente que conoce. ¿Por qué será?

Me encogí de hombros.
-Probablemente porque un extraño nos ve como somos, no como quiere que seamos.
-¿Y como me ves tu a mi?
-Como un misterio.
-Es el cumplido más raro que me han hecho nunca.
-No es un cumplido. Es una amenaza.
-¿Y eso?
-Los misterios hay que resolverlos, averiguar qué esconden.
-A lo mejor te decepcionas al ver lo que hay dentro...
-A lo mejor me sorprendo. Y tu también.

te quiero.

Cuando conoces a alguien que por ciertos motivos o circunstancias de la vida se ha cruzado en tu camino, y tú ni siquiera has llegado a verlo, eso me paso contigo. Pero en un momento determinante algo sucede y te das cuenta de que esa persona apareció en tu vida por alguna razón. De eso me he percatado hace relativamente poco... y sabes? espero que esto siga asi y aunque la distancia que nos separa no sea tan grande me gustaria poder compartir más cosas contigo.  Puedo decir que no son muchos años los que te conozco pero sé que me sobran razones para saber que vas a seguir estando ahí y que cuando lo necesite vas a estar la primera.
Eres una de las personas mas importantes de mi vida y me has enseñado muchas cosas aunque no lo creas.

 [Dar una mano a alguien es mucho más que hacer un favor. No es dedicar unos minutos que te sobran, es dar una parte tuya, es darte tú. Dar la mano es aferrarte y aferrar al otro.]

si eres alguien, es porque yo quiero que lo seas.

Cuando la vida te ofrece algo que supera ampliamente cualquiera de tus expectativas, lo más razonable es disfrutar de su conclusión. Porque si no estás dispuesto a hacer locuras, no mereces enamorarte.

vale la pena arriesgarse

Aunque reír es arriesgarse a parecer un tonto. Aunque llorar es arriesgarse a parecer sentimental. Aunque acercarse a alguien es arriesgarse a involucrarse. Aunque mostrar tus sentimientos es arriesgar tu yo interior. Aunque exponer tus ideas o tus sueños a una multitud es arriesgarse a perderlos. Aunque amar es arriesgarse a no ser amado de la misma manera. Aunque vivir es arriesgarse a morir. Aunque desear es arriesgarse a ser defraudado. Aunque intentar es arriesgarse a fallar. A pesar de todo, debes arriesgarte. Debes correr los riesgos simplemente porque el más grande de los peligros de la vida es no arriesgarse. Las personas que no arriesgan nada o nunca tienen nada, no hacen nada. Tal vez podrán evitar el sufrimiento y la tristeza, pero no logran aprender, sentir, cambiar, crecer o vivir. Prisioneros de sus temores, son esclavos que han renunciado a su libertad, pues sólo cuando una persona se arriesga, es libre. Los pesimistas se quejan del viento; los optimistas esperan confiadamente que los vientos cambien de dirección y los realistas, ajustan sus velas en la dirección correcta. Arriésgate. Es cierto que puedes perder.

Pero... ¿Has pensado en lo que puedes ganar?